El Senado es un gran desconocido para la mayoría de los ciudadanos, pocos son los que conocen sus funciones y sus tareas, y sin embargo es un órgano constitucional, que representa al pueblo, tanto o más que el Congreso de Diputados.
En el modelo español de Senado, una parte de los miembros son elegidos directamente por los ciudadanos y otra parte por las Asambleas Legislativas de las comunidades autónomas, la elección de los senadores de este último grupo se verifica con arreglo a un criterio de representación mayoritaria atenuada, que prima a los partidos y coaliciones más votadas y a su vez a las comunidades autónomas con más habitantes (recordar que se elige 1 senador por cada millón de habitantes).
Tiene varias funciones, legislativa, de integración territorial, política y sobre todo y la más interesante la de control del Gobierno.
En este momento se está hablando mucho de las leyes y decretos pronunciados por el gobierno de la nación, pero nada se esta diciendo de lo que el Senado podría hacer para vetar esas leyes o influenciar en esa política, sobre todo, teniendo en cuenta que hoy en día la mayoría la ostenta el PP (123 senadores por 105 de PSOE, de un total de 263 senadores actuales).
Una de las cosas en las que puede actuar el Senado en el veto y enmiendas que puede introducir en las leyes, y sin embargo a eso actualmente no se le está dando ningún tipo de importancia ¿porqué?, quizá porque si hay un consenso en la aprobación de ciertas medidas legislativas, pero es mejor hacer la vista gorda y que sea el gobierno el que se lleve los palos por las medidas generadas.
Personalmente, pienso que los senadores del PP podrían hacer muchas más cosas de las que realmente están haciendo, e incluso aprovechar esos vetos y esas enmiendas para definir sus posturas ante las medidas, que una vez aprobadas critican, creo que lo que realmente intentan hacer es tirar la piedra y esconder la mano, porque en la situación actual en la que estamos es una forma de recaudar votos para llegar al poder, y no solo eso, sino que una vez en el poder, las medidas ya tomadas e impopulares, siembre serán achacables a los gobiernos anteriores, cuando realmente cuando podrían hacer oposición real, sería ahora, porque pensemos que pasaría si en el Senado también tuviesen la mayoría el PSOE, ¿que haría el PP sabiendo que prácticamente no saldría ningún veto o enmienda a las leyes?
Ahora mismo me viene a la mente la antigua Ley Orgánica del Aborto, si, para poder crear una ley orgánica como es esta, se necesita mayoría absoluta, que fue conseguida por el PSOE, en aquel momento una medida bastante impopular que fue aprovechada por el PP para su programa electoral, en el cual afirmaban que derogarían dicha ley. Sin embargo, cuando obtuvo esa mayoría absoluta fue incapaz de cumplir su compromiso electoral, porque en ese momento lo impopular y retrogrado era derogar esa ley.
Con esto lo que quiero decir es que la mayoría de políticos, no se mueven por las necesidades reales de la ciudadanía, sino por sus necesidades, por la necesidad que tienen de llegar al poder al precio que sea, incluso dejando sus ideales por el camino.
El problema de los políticos es que desean serlo,y no hay mayor perdición que desear el poder,porque cuanto más se desea,mas corrompe...
ResponderEliminarClaro que podrían hacer mucho más,pero es más fácil sentarse en la poltrona,criticarsen los unos a los otros y esperar que las proximas elecciones los catapulten a lo más alto...